Si tuvieras que elegir una canción
que refleje tu forma de ver la vida en este momento, ¿cuál sería?
La historia de cómo conocí la canción de mi vida en
estos momentos, es algo curiosa. Fui con mi hermana y mi mamá a visitar a mi
primo, quien es un par de años mayor que yo. Él tenía (o tiene) cierta
reputación de ser un “libertino amoroso”: cero enganches sentimentales, mediando
muchas “batallas”. Nos recibió en su casa, siempre acomedido, como buen
anfitrión que es él. Nos invitó algo de tomar y puso música para acompañar la
conversación. De pronto, sonó una melodía que yo no conocía, pero él sí y muy
bien. “Esta es mi canción”, dijo, y continuamos conversando como si nada pasara;
hasta que llegó el coro: “’Cause I’m easy… Easy
like Sunday morning…”, cantaba a viva voz. Por supuesto, decía que era su canción
por la parte de que era “easy” (fácil, casquivano). En
su forma particular de vivir y ver el mundo, le caía a
pelo (aparentemente) dicho verso y canción. Intrigado, unos días después, me
bajé la canción, la escuché y me gustó. Esta pasaría a ser mi canción también,
aunque por motivos un tanto distintos.
A mis 30 años, y a puertas de cumplir uno más en el
siguiente día de la bandera, estoy en un punto donde lo que más valoro es mi tranquilidad
y paz interior. Tiendo a evitar conflictos, situaciones estresantes, y todas
aquellas cosas que me quiten energía de una forma nociva. Después de muchos
años, golpes, experiencias e intranquilidad conmigo mismo, estoy contento con
el lugar donde estoy y dedicándome a lo que me gusta; contento, pero no
satisfecho ni conforme aún. El camino recién empieza.
“Easy” es una canción de Commodores,
del año 1977. Lejos del sentido literal, que podría dar la impresión de un
hombre que dice que es fácil (como sería mi primo), esta canción usa la
expresión “Easy like Sunday morning”
para hablar de aquellos pueblos pequeños donde hay poca o nula actividad en
dicho día. Es un lugar libre de ruido y alboroto; todo es paz y tranquilidad
(similar a algunos lugares de provincia a la hora de la siesta post almuerzo y
pre “lonche”).
Tengo entendido que la canción, al inicio, habla
también de la salida de una relación tormentosa, pero poco y nada de eco me
hace esa parte. Lejos de reflejarme en la canción por ser un hombre fácil (y
habría que definir “fácil” para qué), aquí se habla de una persona que se
encuentra en calma y tranquilo con sus acciones, con lo que hace y lo que hizo.
No me consta que se haya amistado con su pasado y su presente, pero lo puedo
asumir como interpretación mía. Valora su libertad siendo él mismo, libre de
cadenas y ataduras tales como órdenes o juicios de otros. Está en paz siendo
como es. Cabe mencionar que no se trata de alguien que quiera morirse solo (“forever alone”), pero en temas amorosos, la calma, tranquilidad y disfrute que pueda tener con la mujer elegida, es un punto importante a considerar.
Así como cuando estás realmente enamorado y todas son “tus”
canciones (“hay tanto que inventar, no
hay nada que fingir, me enamoré de ti”); así como cuando terminas una
relación y el mundo se te viene abajo escuchando lo que sea (así como “me dediqué a perderte y me ausenté en
momentos que se han ido para siempre”), también puedes encontrar una
canción con la cual te identifiques; hay para todos los gustos, y para todos los cosidos, descosidos y sordos musicales (hablo de ti, “Despacito”). ¿Cuál sería la tuya en estos momentos?
“That’s why I’m easy, easy like Sunday morning”...
P.S.: agradecimientos a la guapa gaucha quien, sin
darse cuenta, me ayudó a encontrar las letras antes citadas.
Entrada anterior:
Cuestión de fe:
http://el-silencio-escrito.blogspot.pe/2017/03/cuestion-de-fe.html
Siguiente entrada:
Estables vs. Soñadores (II)